"Señor Presidente de la República, el Palacio del Descubrimiento debe reabrirse."

Señor Presidente de la República,

El Palacio de la Découverte, diseñado en 1934 por Jean Perrin, nuestro antepasado y amigo, el primer museo de ciencias en el corazón de París, instalado en el ala oeste del Grand Palais como símbolo de una República que cree en la investigación científica, en los beneficios del conocimiento y de la experimentación y en la importancia de la mediación, corre el riesgo, a pesar de las magníficas obras de renovación realizadas y financiadas por el Estado, de no volver a abrir sus puertas como tal.

Los temores sobre su futuro , que habían proliferado en los círculos científicos desde 2010, habían sido disipados por usted en varias ocasiones.

Durante casi cien años, la imagen de la ciencia en acción ha contribuido a inculcar el gusto por la ciencia, la tecnología y la experimentación en millones de futuros científicos, ingenieros y técnicos de nuestro país, quienes reconocen y defienden este espacio. Nuestro país necesita más que nunca científicos e investigadores creativos para afrontar los retos de nuestro tiempo.

Si la ciencia es atacada tan injustamente en todo el mundo, si el CNRS ha invertido tanto en el diseño de los lugares como en la mediación de las experiencias, y si las obras de la Cité des sciences serán largas y complejas de financiar, bloquear esta reapertura significa poner en orden lo que constituye uno de los elementos vitales de nuestro país y lo que garantizará su futuro: la ciencia y el método científico.

El Palacio del Descubrimiento, en el Palacio de Antin, contiguo al Grand Palais, más dedicado a las artes, es el símbolo mismo de esta unidad de la cultura a la que tanto nos apegamos.

Señor Presidente, mantenga el Palacio del Descubrimiento en el lugar que le corresponde en el corazón de París. Es un símbolo de la cultura científica y una invitación a hacer de la ciencia nuestro futuro.